Cuando haces frente a la cuota de la hipoteca pagas una parte en concepto de capital principal y otra por los intereses. En otras palabras, el banco te prestó una cantidad de dinero para financiar la compra de tu vivienda y tú se lo vas devolviendo mensualmente. Por tanto, el capital amortizado es el importe que ya has devuelto al banco desde que firmaste la hipoteca.
El método más utilizado en España es el sistema de amortización francés, con cuotas constantes, siempre que el indicador no varíe. No hay que olvidar que, si has llegado al 100% del capital amortizado, no quiere decir que la hipoteca esté completamente cancelada. Tendrás que acreditar ante notario que el préstamo ha sido pagado e inscribirlo en el Registro de la Propiedad.
