¿Qué es la carencia en una hipoteca?
- Las entidades bancarias pueden ofrecer a sus clientes disminuir la cuota mensual de su hipoteca en el caso de que tengan dificultades a la hora de hacer frente a los pagos
- La duración del periodo de carencia depende de cada banco y puede llegar hasta los cinco años
El alza de los precios del alquiler ha empujado a muchas personas a comprar una vivienda. Pero es posible que alguno de ellos, durante la vida del préstamo hipotecario, lleguen a tener serias dificultades para hacer frente a sus cuotas. Ante estos casos, las entidades bancarias pueden ofrecer una alternativa: el conocido como periodo de carencia.
Durante ese tiempo, la persona hipotecada tiene la posibilidad de pagar una cuota mensual más reducida con la que se abonarán solamente los intereses (carencia parcial) o, incluso, de aplazar completamente algunas de esas cuotas (carencia total). La duración de este periodo es variable y depende de lo que establezcan las diferentes entidades bancarias. Estas podrán ofrecer una carencia que irá desde varios meses hasta, incluso, los cinco años.
Solicitar al banco esta prórroga para la hipoteca puede ser una solución para aquellas personas que hayan visto menguar sus ingresos de manera considerable, pero se trata de una opción que no está exenta de desventajas que conviene estudiar con detenimiento.
En Rastreator.com analizamos todas las claves para que tengas claro cuáles son los pros y los contras de esta fórmula que podrás negociar con tu banco.
¿Merece la pena pedir una carencia hipotecaria?
La carencia de una hipoteca es un periodo de tiempo en el que la entidad bancaria ofrece a sus clientes la posibilidad de pagar una cuota mensual más reducida, en la que únicamente se abonan los intereses, o de aplazarla temporalmente. En ocasiones, este periodo de carencia tiene lugar al inicio de la vida del préstamo, lo que supone un desahogo para los hipotecados después del desembolso que implica la compra de una vivienda. Pero otras veces es concedido más adelante, en situaciones en las que la reducción o el aplazamiento de cuotas es vital para que se puedan afrontar los futuros pagos de la hipoteca.
En el caso de conseguir pagar sólo los intereses, la cuota podría reducirse hasta la mitad. En España suele aplicarse el sistema de amortización francés. Con este, el pago se divide en dos partes, uno para amortizar el capital y otro para pagar intereses.
Establecer un estándar en lo que a las condiciones de las carencias se refiere es prácticamente imposible, ya que varían considerablemente de una entidad a otra. De hecho, algunas ni siquiera dan la opción a sus clientes de beneficiarse de ello.
¿Todas las hipotecas aplican la carencia?
Siempre puedes negociar un periodo de carencia con tu banco, pero en el mercado hipotecas ya existen muchas entidades que la ofrecen directamente como una de sus ventajas estándar. Algunas de las que cuentan con productos de estas características son Abanca, Bankinter o Laboral Kutxa, entre otras.
Conviene recordar que en 2012 el Gobierno aprobó una ley que incluía un Código de buenas prácticas bancarias que pretendía mejorar la situación de los hipotecados con dificultades para hacer frente al pago de su deuda, entre otras cuestiones. El texto proponía ofrecer un periodo de carencia parcial de cuatro años o ampliar el plazo del préstamo hasta los 40 años a todos los hipotecados que se encontraran en una situación de mayor vulnerabilidad. No obstante, para beneficiarse de ello, tanto los clientes como las hipotecas debían cumplir una serie de requisitos que, posteriormente, fueron modificados con la aprobación de la Ley de la Segunda Oportunidad en 2015.
Si el banco con el que has contratado tu hipoteca no se ha acogido al Código de buenas prácticas bancarias, el periodo de carencia no estará garantizado en ningún caso.
¿Cuáles son los costes de la carencia hipotecaria?
Si has decidido solicitar un periodo de carencia hipotecario a tu entidad bancaria debes saber que su concesión encarece el precio final del préstamo. Aunque durante el periodo de carencia la cuota mensual se reducirá de manera importante, en el momento en el que se vuelvan a aplicar las condiciones originales, la cuota será más elevada que al principio. Esto es así porque el capital pendiente en ese momento será más alto de lo que sería en el caso de no haber solicitado la carencia, lo que hace que se paguen más intereses en comparación de lo que se hubiera abonado con una amortización normal.
Asimismo, después de solicitar un periodo de carencia es necesario realizar una novación de la hipoteca. O lo que es lo mismo, se volverán a definir las condiciones del préstamo. En la mayoría de los casos, los bancos aplican una comisión por este concepto que está en torno al 1% del capital pendiente, aunque puede ser incluso superior.
¿La carencia es la única opción cuando hay dificultades para pagar?
Solicitar un periodo de carencia no es la única opción de la que dispone un cliente cuando tiene dificultades para pagar la cuota de la hipoteca. Existe otra alternativa, como es alargar el plazo del préstamo. No obstante, tampoco se trata de una solución gratuita.
Si tienes, por ejemplo, una hipoteca a 20 años y decides pasarla a 30 años para hacer frente de manera más cómoda a las cuotas, debes tener en cuenta que el pago de intereses subiría, pues se calculará para un periodo de amortización más largo. Además, también sería necesario abonar la comisión por novación (alrededor de un 1% sobre el capital pendiente).
Comparar las mejores hipotecas
Pedir un periodo de carencia no siempre es la opción más acertada cuando existen dificultades para hacer frente a las cuotas de un préstamo hipotecario. Beneficiarse de una cuota reducida durante un periodo de tiempo lleva aparejado gastos importantes a la larga, por lo que conviene meditar si se trata de la alternativa más acertada. ¿Necesitas ayuda para conocer cuáles son los préstamos más atractivos del mercado? Descubre cuál es el que más se adapta a tus necesidades con el comparador de hipotecas de Rastreator.com. Además, si quieres disponer de asistencia extra para lidiar con todo el proceso nuestros asesores hipotecarios te lo facilitarán y simplificarán y, además, buscarán el mejor préstamo hipotecario para ti.
Febrero 2019
Licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas. experta en Marketing y en mercados y productos financiero.