La Comunidad de Madrid prepara nuevas rebajas fiscales para hipotecas variables

• El Gobierno regional aplicará una deducción en el IRPF de las personas con hipoteca variable que supondrá una bonificación del 25% sobre la diferencia entre el tipo de interés del préstamo en 2024 y 2022
• También se creará una desgravación de 1.000 euros para aquellos caseros que arrienden como vivienda habitual inmuebles que hayan estado vacíos un año o más

La vivienda ha irrumpido como uno de los principales problemas para los españoles en el informe de junio elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En concreto, ha pasado de ocupar la sexta posición en la tabla de preocupaciones que realiza este organismo, a la segunda plaza, por encima del paro y de la economía. Así, mientras los propietarios de viviendas que financiaron su compra con una hipoteca variable siguen sufriendo las consecuencias de la subida de los tipos de interés, con unas mensualidades disparadas, quienes buscan piso de alquiler se encuentran con una oferta muy limitada y con unos precios desorbitados que dificultan el acceso a una vivienda. Ante esta situación, la Comunidad de Madrid prepara una nueva batería de rebajas fiscales en materia de vivienda con el objetivo de facilitar la compra, el alquiler y combatir la despoblación.

Según previsiones del Ejecutivo autonómico madrileño, las nuevas medidas -que calculan beneficiarán a cerca de medio millón de ciudadanos con un ahorro estimado de 118,2 millones de euros en su primer ejercicio de su vigencia- se pondrán en marcha este año.

Deducción por hipoteca variable

Una de estas medidas está dirigida a los propietarios de una vivienda habitual con hipoteca a tipo variable que se hayan visto perjudicados por la subida del euríbor. Para ellos, la Comunidad de Madrid aplicará una bonificación en el impuesto de la renta (IRPF) del 25% sobre la diferencia entre el interés de la hipoteca en 2024 y el de 2022, tomando como referencia el dato a diciembre para ambos ejercicios. El Gobierno madrileño estima que esta deducción, que tendrá un límite máximo de 300 euros anuales, beneficiará a cerca de 450.000 contribuyentes y generará un alivio fiscal en torno a los 90 millones de euros.

Beneficios para los caseros

Además, con el objetivo de activar la oferta de vivienda en alquiler, el Ejecutivo autonómico también prepara un incentivo para aquellos propietarios que pongan sus viviendas en alquiler. En concreto, se establece una deducción en el IRPF de 1.000 euros a quienes, como caseros, formalicen nuevos contratos de arrendamiento de vivienda habitual. Eso sí, para acceder a esta desgravación hay que cumplir una serie de requisitos. En este caso es que la vivienda haya estado en desuso al menos un año antes de alquilarla y que el nuevo contrato de arrendamiento tenga una duración superior a tres años. Además, para poder acceder a esta deducción, el beneficiario no puede tener más de cinco inmuebles en alquiler. En este sentido, desde la Comunidad de Madrid calculan que esta medida puede alcanzar a 20.000 ciudadanos.

Medidas fiscales para combatir la despoblación

Otra de las rebajas tributarias anunciadas por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en materia de vivienda trata de poner coto a la despoblación en los municipios de menos de 2.500 habitantes de la Comunidad de Madrid. El objetivo de esta medida -que se prevé pueda beneficiar a más de 1.200 contribuyentes- es ayudar a los jóvenes menores de 35 años, incentivándoles a que establezcan su residencia habitual en alguna de estas localidades. Para ello, se fija una deducción por traslado de la residencia a uno de esos municipios de 1.000 euros en el periodo impositivo en el que se produzca el cambio de residencia, con la condición de que el contribuyente la mantenga los tres ejercicios siguientes.

Por otro lado, los jóvenes que adquieran una vivienda habitual en uno de estos pueblos se podrán deducir el 10% del precio de adquisición, con un límite anual de 1.546 euros durante diez ejercicios fiscales. Junto a esto, se establecerá una bonificación del 100% en los impuestos de Transmisiones Patrimoniales (ITP), en el caso de que se adquiera una vivienda de segunda mano, y de Actos Jurídicos Documentados (AJD), si la vivienda que se compra es nueva.

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