¿Puedo contratar una hipoteca si tengo un préstamo personal?
- Antes de dar el visto bueno a cualquier financiación para la compra de una vivienda, uno de los aspectos que analizan las entidades es la solvencia del solicitante y el historial crediticio
- Nada impide pedir una hipoteca si ya se tiene un préstamo, aunque puede resultar más difícil que el banco la conceda si no se garantiza una suficiente capacidad de endeudamiento
La contratación de la hipoteca es, probablemente, una de las operaciones financieras más importantes a las que tienen que hacer frente los hogares. Y es que su firma conlleva un compromiso económico a largo plazo, que supondrá destinar una parte de los ingresos mensuales a pagar las cuotas del préstamo durante unos cuantos años. Y, para minimizar en la medida de lo posible cualquier riesgo de sobreendeudamiento e impago, los bancos suelen analizar al máximo el perfil y la salud financiera de cada persona antes de conceder una hipoteca.
Así, una de las cuestiones que tendrá en cuenta la entidad bancaria es el historial crediticio y si el solicitante está pagando otras deudas. Si es tu caso y te estás preguntando cómo puede influir a la hora de contratar financiación para vivienda, debes de saber que nada impide pedir una hipoteca si ya se tiene un préstamo. Eso sí, puede resultar más difícil que el banco te la conceda, aunque todo dependerá de tu capacidad de endeudamiento.
Demostrar solvencia económica
En este sentido, para que el banco te conceda la hipoteca deberás demostrarle que eres solvente y que serás capaz de devolver el préstamo. Y para comprobarlo, la entidad realizará un estudio pormenorizado de tu salud financiera. Así, para evaluar si eres apto o no para hacer frente a varios préstamos a la vez, uno de los primeros aspectos que analizará tu banco es tu historial de crédito. Si estás pagando otro préstamo, el banco comprobará si estás al corriente de pagos.
También analizará cómo has cumplido con tus obligaciones de pago (si lo has hecho en el tiempo y en la forma acordados) en el préstamo que tengas en la actualidad y en anteriores, si los has tenido. Si has cumplido, aumentan las posibilidades de que den el visto bueno a la hipoteca. De hecho, aunque tengas una buena salud financiera, como en el pasado hayas tenido problemas al devolver créditos es posible que tu banco ponga pegas a concederte financiación para la vivienda.
Endeudamiento personal inferior al 35%
En cualquier caso, se recomienda que el nivel de endeudamiento personal—el de la suma del préstamo ya suscrito y el de la hipoteca- no supere el 35% de los ingresos anuales. Y es que otro de los aspectos que tendrá en cuenta tu banco es si tus ganancias son suficientes para cubrir el monto de tu deuda actual y el de la futura de la hipoteca. Si consigues que lo que destinas al pago de tu deuda no supere ese porcentaje, es posible que te concedan una hipoteca, aunque tengas un préstamo previo. Si no es así, puedes encontrarte con que la entidad rechace la solicitud por considerar que con el préstamo hipotecario excederías tu capacidad de pago.
En definitiva, cómo influirá tener un préstamo a la hora de pedir una hipoteca dependerá en gran medida de tu capacidad de pago. Siempre que tu ratio de endeudamiento sea el apropiado, podrás pedir financiación para una vivienda aunque estés pagando otro préstamo. Eso sí, si no cuentas con unos ingresos mínimos ni con estabilidad laboral, tener un crédito personal no te ayudará a conseguir la aprobación de tu hipoteca.
Periodista multidisciplinar especializada en información económica, marketing y publicidad. Ha desarrollado su carrera profesional en diferentes medios de comunicación, principalmente impresos y digitales, pasando también por la comunicación institucional y corporativa.
Experto en mercado hipotecario y productos financieros