¿Por qué algunas compañías no aseguran coches chinos?
- La falta de disponibilidad y acceso a las piezas de repuesto provoca el negacionismo de las aseguradoras
- Las marcas chinas deben establecer redes postventa en las áreas locales para competir en terreno europeo
La incursión de los coches chinos en el mercado europeo ha sido un fenómeno notable en la última década. Según ACEA, la asociación de fabricantes europeos, a lo largo de 2023 se matricularon en los 27 países miembros un total 243.000 coches chinos. Por ende, el 2,4% de los coches vendidos en Europa el año pasado eran de origen chino.
Gracias a su precio atractivo y características tecnologías atractivas, poco a poco estos vehículos han ganado terreno en un mercado altamente competitivo. No obstante, a pesar de su creciente popularidad entre los conductores, algunas compañías de seguros de coche han mostrado reticencia a asegurarlos, puesto que plantean serios interrogantes sobre la viabilidad y asequibilidad del aseguramiento.
Para comprobar las hipótesis sobre la desconfianza hacia los coches chinos por parte de los seguros, el medio británico Auto Express ha elaborado un estudio junto con las principales aseguradoras de Reino Unido. La principal conclusión de este análisis es que pocas compañías de seguros de coche están dispuestas a cubrir los coches chinos.
Falta de disponibilidad y acceso a las piezas: las barreras para contratar un seguro
Tal y como indica el estudio de Auto Express, uno de los principales obstáculos que enfrentan las aseguradoras al considerar la cobertura de coches chinos es la falta de disponibilidad y accesibilidad de piezas de repuesto. En muchos casos, las compañías no obtienen rápidamente las piezas necesarias para reparar estos vehículos en caso de accidentes o avería. Esta falta de disponibilidad puede generar retrasos significativos en el proceso de reparación, lo que a su vez aumenta los costos tanto para las compañías de seguros como para los propietarios de los vehículos.
Por el contrario, la marca MG emerge como una excepción, puesto que es el único fabricante chino que cuenta con centro de repuestos en Europa, lo que facilita el proceso de reparación y aseguramiento de sus vehículos en el continente. Este hecho incomoda a las otras marcas chinas que carecen de esta infraestructura, lo que aumenta la incertidumbre y los costes asociados con la reparación y el aseguramiento de sus vehículos.
Además, existe una disparidad en los estándares de reparación entre China y Europa, lo que complica aún más el proceso de aseguramiento de coches chinos. Prácticas comunes en China, como la reparación completa de un lado de la carrocería después de un accidente, pueden resultar poco prácticas o excesivamente costosas en Europa debido a los mayores costos laborales y los estándares de calidad más rigurosos. Esta diferencia puede generar conflictos entre las aseguradoras y los talleres de reparación, lo que obstaculiza aún más el proceso de aseguramiento de estos vehículos.
Los obstáculos con las aseguradoras provocan la reflexión de los fabricantes chinos
Estos obstáculos con las aseguradoras han hecho reflexionar a muchas marcas chinas, que están comenzando a comprender mejor cómo funciona el mercado europeo. Es cierto, que los fabricantes chinos tienen la capacidad de producir cantidades ingentes de vehículos a gran velocidad y consiguen transportarlos por toda Europa sin complicaciones, pero sus clientes también necesitan el soporte y la garantía de que estos vehículos podrán repararse sin problema y de manera rápida en caso de siniestro. Las marcas chinas no solo deben cambiar su mentalidad en cuanto a las reparaciones de los vehículos, sino también establecer redes de postventa que puedan competir con las marcas tradicionales.
Pese a la popularidad creciente de los vehículos chinos, la mayoría de los clientes prefieren tener cerca un servicio oficial de marcas reconocidas como Renault, Opel o Volkswagen. Muchos aún muestran cierto rechazo hacia estos coches debido a la dificultad para encontrar servicio técnico oficial de marcas como DFSK, Omoda o Aiways. Esta falta de presencia local influye en la percepción del cliente, lo que subraya la importancia de establecer una red sólida de servicio postventa para ganar la confianza del consumidor europeo.
Por último, aunque los propietarios de los vehículos chinos confían en que la situación se repare con el paso de los años, todavía deben hacer frente a las restricciones de los seguros. A menudo, las compañías cobran primas mucho más elevadas por asegurar este tipo de vehículo, o incluso se niegan a asegurarlos.
Periodista experta en seguros, telefonía y tecnología. Escribe artículos, noticias y guías sobre todo tipo de seguros y finanzas.