Alarma en el seguro de hogar: ¿baja el precio?

7 minutos
  • Hay 3 tipos de alarmas en el mercado: las disuasorias, las que no están conectadas a una centralita y las que sí están conectadas a una centralita
  • En el momento de presupuestar una póliza de hogar, uno de los factores que influyen el precio final es si la vivienda tiene instalada una alarma o no
seguro de hogar
La alarma en el seguro de hogar

La forma más sencilla de proteger tu casa es contratando un seguro de hogar, sin embargo, toda precaución es poca. Y es que además de la póliza a veces es necesario reforzar con seguridad extra, más aún en la época estival cuando los hurtos en domicilios son más frecuentes que en otros periodos del año. El verano y los periodos vacacionales son momentos clave que los ladrones aprovechan para cometer robos y es importante estar prevenido antes estas situaciones.

En algunas ocasiones, los seguros de hogar tienen ciertas ventajas si la vivienda cuenta con una alarma antirrobo. Por tanto, es importante conocer todas sus particularidades para que puedas decidir cuál es la mejor para ti.

¿Cómo influye la alarma en el seguro de hogar?

En el momento de presupuestar una póliza de hogar, uno de los factores que influyen el precio final es si la vivienda tiene instalada una alarma o no. Y es que las compañías pueden realizar un descuento en el cálculo del seguro, aunque esto siempre va a depender del tipo de alarma instalada y de la compañía. Sin embargo, también hay algunos casos en los que tener alarma va a influir directamente en que el seguro se haga cargo del siniestro o no. Aunque está claro que siempre será tu aseguradora la que tendrá la última palabra en el condicionado general.

¿La alarma puede bajar el precio de tu seguro de hogar?

Tener una alarma disuasoria o no conectada a una centralita puede no tener ningún efecto en el precio del seguro, puesto que aunque se trata de una variable a tener en cuenta, al no ser real, no tiene efecto en el cálculo. Por su parte, las alarmas conectadas a una centralita y monitoreadas, sí que pueden contar como variables en el momento del presupuesto. Para algunas aseguradoras es importante contar con una instalación de este tipo, ya que activa un protocolo ante un posible robo y en cierta forma garantiza que los ladrones desistan en su tarea o que se lleven el menor número de cosas posible.

Sin embargo, un sistema de alarma monitoreado que esté conectado a una empresa de supervisión las 24 horas aunque te puede ayudar a que tu póliza sea más barata, también puede jugar en tu contra. En algunos casos, si durante el robo, la alarma no ha saltado, bien por un fallo o porque los propios ladrones la desactiven, es muy probable que la compañía aseguradora no se haga cargo del siniestro. Algo que también puede pasar en el caso de que la alarma sí salte. Es decir, aunque el sistema se active, la aseguradora no estaría obligada a cubrir ningún gasto porque presupone que el hogar está protegido por el sistema, y si éste falla no tiene la obligación de hacerse cargo.

Por tanto, lo mejor es que antes de contratar en seguro de hogar revises bien el condicionado de la póliza para que todas tus dudas con respecto al sistema de alarma queden solucionadas. Y es que cada compañía tiene sus propias normas y criterios en cuanto a los seguros de hogar, el precio de los mismos y las variables que influyen en el cálculo, así como de las coberturas y demás particularidades.

Tipos de alarmas

No todas las alarmas son iguales y a la hora de escoger una u otra, lo mejor es que conozcas qué puntos las diferencian y qué puntos tienen en común.

Alarmas sin monitoreo

Son aquellas instalaciones compuestas por luces y sonidos que se encargan de disuadir a los ladrones. Principalmente son los vecinos los que se percatan de que algo raro está pasando porque pueden escuchar desde sus propias casas el sonido que emite la alarma al ser activada. Dentro de estas existen varios tipos: ficticias o disuasorias, sin centralita o con centralita.

  • Ficticias/Disuasorias: Suelen ser instalaciones que simulan una real y que se utilizan principalmente para disuadir a los ladrones en caso de que éstos estén merodeando por la zona. Cámaras sin conectar, sirenas y detectores falsos que funcionan con pilas, forman este simulacro de alarma.
  • Sin centralita: Están compuestas por diferentes componentes que suelen ser detectores de movimiento y que al activarse emiten un sonido de unos 120 decibelios. De esta forma los vecinos pueden enterarse y llamar a la policía, o incluso los propios habitantes de la casa pueden ponerse en alerta en caso de encontrarse dentro de la vivienda.
  • Con centralita: Están conectadas con una centralita de forma inalámbrica o mediante cable. Son las más completas porque se les pueden añadir más detectores, como por ejemplo el de humos o incluso sensores de inundación.

Sistemas monitoreados

Son aquellas instalaciones realizadas por una empresa especializada en el sector, que además se encargará de hacer un seguimiento 24 horas al día. Por tanto en caso de que ésta se active, la central receptora de alarmas se encargará de poner en marcha el protocolo establecido para que tanto el propietario de la vivienda como la policía sean avisados de tal circunstancia.

¿De qué está compuesto un sistema de alarma?

Son varios los componentes de un sistema de alarma, aunque todos tienen el mismo fin, que es activarla y poner en marcha el mecanismo. Algunos de ellos son estándar y los tienen todas las alarmas del mercado, otros sin embargo, son opcionales y tenerlos o no dependerá del presupuesto.

Estándar

Son aquellos elementos que componen una alarma básica, es decir, los que son imprescindibles para su correcto funcionamiento. Si uno de ellos falta, el sistema directamente no funciona.

  • Panel de control: Es el dispositivo encargado de controlar y recibir las señales de los sensores y detectores instalados por la vivienda. Además incluye la conexión con la central de monitoreo para avisar en caso de robo, almacena las claves y reserva batería para que, en caso de emergencia, el sistema continúe en funcionamiento.
  • Teclado: El teclado numérico es la herramienta con la que activar y desactivar la alarma.
  • Sirena: Es la encargada de avisar de forma sonora que en la vivienda hay un imprevisto. Suelen tener un volumen muy alto, con el que en caso de que no estés en casa, tus vecinos podrán escucharlo sin problema.
  • Sensores para ventanas y puertas: Son los dispositivos que están colocados en las ventanas y las puertas, y que se encargan de activar la alarma en caso de detectar que éstas se mueven.
  • Detectores: Tanto de movimiento como de sonido, son los encargados de poner en funcionamiento la alarma si captan un sonido fuerte o movimiento dentro de la casa. En algunos casos, tienen un control especial para casas en las que hay mascotas, para que éstas se puedan mover libremente sin que la alarma se active.

Opcionales

Se trata de elementos opcionales que pueden formar parte de la alarma para hacerla más completa. No son imprescindibles para el funcionamiento de ésta, pero en caso de tenerlos siempre van a ayudar a tener más protegida la vivienda.

  • Sensores infrarrojos: Su misión principal es activar la alarma en caso de detectar calor corporal de cuerpos extraños, por ejemplo, ladrones. Al igual que los sensores de movimiento, en algunos casos se pueden desactivar en las casas con mascotas para que éstos puedan caminar por la vivienda sin problemas.
  • Control por vídeo: Diversas cámaras distribuidas por la casa harán que haya un registro de vídeo en la central disponible para que pueda usarse en el seguimiento policial, en caso de ser necesario.
  • Botón del pánico: Es un botón que activa una alerta directamente en la estación central ante una situación emergencia.
Escrito por:
Patricia Carril

Graduada en Administración y Dirección de Empresas. Es un referente de información especializada en seguros de hogar, viaje y dispositivos móviles para la prensa.

Más guías