¿Qué tipos de seguros médicos existen?
- El seguro médico sin copagos permite el acceso a servicios médicos ilimitados a cambio de una prima fija
- El seguro de salud sin hospitalización suele ser la opción más económica
En España hay 9,2 millones de personas que cuentan con un seguro de salud privado, como complemento a la Sanidad Pública, según el Informe de la Sanidad Privada 2021, elaborado por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS). Las aseguradoras cuentan con una oferta muy amplia de seguros médicos privados, que intentan adaptarse a todos los perfiles de cliente, teniendo en cuenta no sólo sus necesidades médicas, sino también las económicas.
Existen tantos tipos de seguros de salud como pólizas hay en el mercado. Cada seguro de salud es único, ya que las coberturas incluidas pueden cambiar de una aseguradora a otra e, incluso, entre varias modalidades de póliza de la misma compañía.
Sin embargo, podemos hablar principalmente de 6 tipos de seguros médico: de cuadro médico sin copago, con copago, baremado, de reembolso, sin hospitalización y seguro dental. Conocer la diferencias que existen entre ellos es fundamental para elegir la póliza que mejor se adapta a tus necesidades.
Tipos de seguros de salud:
Seguro de cuadro médico sin copagos
El seguro Médico sin copagos consiste en que a cambio de un pago fijo, el asegurado puede acceder a todos los servicios sanitarios que ofrezca la compañía dentro de su cuadro médico. Es decir, a cambio de una cuota, que normalmente es mensual, el asegurado puede disfrutar del servicio médico completo incluido en su póliza, sin límite y sin tener que asumir ningún pago adicional.
Dentro de este tipo de seguro suelen estar incluidas todas las pruebas diagnósticas, hospitalización, consultas médicas, análisis clínicos, intervenciones quirúrgicas, etc. en todos los centros, y con todos los profesionales sanitarios incluidos dentro del cuadro médico de la aseguradora.
No obstante, suele ser habitual que en estas pólizas se incluyan algunas especialidades de manera limitada, como por ejemplo la dental, la fisioterapia o la asistencia psicológica. Este servicio suele estar limitado a determinadas prestaciones y con un límite de uso anual.
Seguro médico con copagos
El seguro de Salud con copagos funciona de manera distinta. En este caso el asegurado también tiene que asumir una cuota, aunque más baja la de los seguros sin copagos. A cambio, el seguro no se hará cargo de todos los gastos médicos, sino que el asegurado tendrá que asumir una parte del coste de la consulta, prueba médica o tratamiento, cada vez que lo reciba.
Este seguro suele ser apropiado para gente que no acude al médico muy a menudo, ya que a cambio de una prima no muy alta puede acceder a todo el cuadro médico de la aseguradora y sólo pagar por los servicios sanitarios cada vez que los necesite. Además, el importe de la consulta, prueba o tratamiento será más barato que el que tendría que asumir si no hubiera contratado el seguro.
Por otro lado, en muchos seguros con copago a menudo se incluye dentro del precio de la prima, determinados servicios como pueden ser análisis clínicos o algunas consultas médicas.
Seguro médico baremado
La póliza Médica baremada tiene un funcionamiento muy similar al seguro con copagos. Con esta póliza el asegurado paga una prima periódica, y además, asume parte del coste del servicio médico que reciba. La diferencia respecto a los seguros de copago tradicionales es que en los baremados la parte fija a pagar, es decir, la prima, es mucho más barata; mientras que la parte variable, o sea el coste por servicio, es más elevado. De esta forma, el asegurado pagará menos mes a mes, pero cuando acuda a una consulta o se someta a una prueba, el precio será mayor que en el caso de los seguros de copago.
La ventaja que tiene este tipo de póliza es que no suele contar con periodos de carencia, ni tampoco establece exclusiones a determinado perfil de asegurado, como puede ser por ejemplo, por la edad.
Seguro médico de reembolso
Los seguros de Salud más completos son los de reembolso. Dentro de esta modalidad de póliza, hay dos tipos: Seguro mixto, que incluye un seguro de cuadro médico más uno de reembolso; y el seguro puramente de reembolso.
El primero de ellos, el mixto, suele implicar una prima más cara, ya que engloba dos tipos de seguro. Por un lado, ofrece un seguro sin copagos con el que puede acceder al cuadro médico de una aseguradora, sin pagos adicionales. Por otro, cuenta con la opción de reembolso, que le permite visitar profesionales y centros ajenos al cuadro médico de su aseguradora. En este caso, el usuario tendrá que abonar el importe de la consulta o prueba médica a la que se haya sometido, y posteriormente su compañía se lo devolverá. Eso sí, la devolución no siempre es del importe íntegro que se ha pagado, sino que suele oscilar entre el 70% y el 100% del total.
En la modalidad únicamente de reembolso, la diferencia es que el asegurado no tiene acceso a ningún cuadro médico concreto. De este modo, cada vez que acuda al médico, tendrá que abonar el precio de la visita y la aseguradora le reembolsará el importe que haya acordado. En este caso, al no tener asociado un cuadro médico concreto, la prima suele ser un poco más reducida que en el seguro mixto.
Seguro médico sin hospitalización
En el lado opuesto a los seguros de reembolso, se encuentran los seguros que no incluyen la hospitalización. Esta póliza es una de las más económicas ya que no cubre hospitalizaciones, ni las cirugías que la requieran, que son los servicios más caros. Por el contrario, el usuario puede acceder al cuadro médico de la compañía para visitar a especialistas, consultas o someterse a pruebas diagnósticas.
En este seguro también existe la opción del copago. Es decir, el asegurado puede disfrutar de la cobertura de hospitalización si asume una parte de los costes que se deriven de ella.
Seguro dental
El seguro Dental puede contratarse dentro de una póliza de Salud completa, o como un seguro en sí mismo. La peculiaridad de los seguros Dentales es que no cubren la totalidad de los tratamientos, sino que siempre llevan asociado un copago. Así por ejemplo, la mayoría de seguros de este tipo incluyen dentro del pago de la prima, determinados tratamientos como por ejemplo, una o dos limpiezas anuales, o las extracciones de muelas. Eso sí, el resto de servicios no cubiertos tendrán un coste menor que el que tendrían en caso de no contar con ningún seguro.
Elegir el mejor seguro para ti
Antes de contratar un seguro de salud es importante saber cuál es el tipo que más se adapta a ti. Con el comparador de seguros de salud de Rastreator podrás ver todo lo que te ofrecen las aseguradoras tanto en coberturas como en precios y podrás elegir la que más te convenga.
Licenciada en Administración y Dirección de Empresas. Responsable de producto de seguros de salud, vida, decesos y mascotas.